domingo, 20 de noviembre de 2016

Penados I

Me sostengo,vacilo,
Tiemblo y me mantengo,
Inerte
Casi muerta por dentro.
Sin necesidad de bisturí
Sacaron de lo mas hondo de mí,
El sostén de la vida.
Sin necesidad de bisturí
La carne se abrió,
La caja torácica
Con los tendones como colgajos
Quedo abierta,
Los órganos expuestos
Y sin dudarlo un momento
Y con firmeza
El estado hurgo en mis vísceras aun calientes
Y arrancó mi hálito de vida
Aún con un ritmo,leves sacudidas
Y lo alejó de mí.
Se lo llevó a una celda con barrotes,
En un módulo con más barrotes,
En un recinto lleno de barrotes,
Del color de la sangre.
Solo,y gracias, veo
Desde el día aciago
A mi corazón a través del muro de metacrilato,
Tiempo cronometrado
Que aprovechamos hasta para discutir.
Pero, ¿donde se vio que un órgano independiente,
se halle más sano que quien lo tuviere?
Pues mi corazón siempre fue fuerte,
Con o sin el resto de mi,
Pero no creo la historia que diga
Que sin corazón el cuerpo puede vivir.

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